5 acciones de resiliencia para lidiar con la pandemia
Hablar de resiliencia durante esta pandemia que golpea nuestro bienestar, no solo físico sino también mental y emocional, pareciera paradójico.
Por: Psic. María Daniela Vivas Busani – Team Psicovivir
Desde hace prácticamente un año y medio, se ha configurado una situación compleja y un entorno de incertidumbre para los individuos de todo el mundo.
Esta época nos ha embestido de manera abrumadora y dolorosa, una crisis con efectos secundarios como ansiedad, depresión, incertidumbre y frustración y que, a la vez, nos ha pedido sacar lo mejor de nosotros: adaptarnos para poder seguir.
Hemos vivido momentos difíciles como pérdidas laborales, perdidas físicas de familiares, confinamiento, flexibilización y todo esto es una constante adaptación tanto física como mental.
A pesar de este ambiente tan adverso, no todo está perdido.
Logramos desplegar en nuestra vida, actividades que nos permiten ver un panorama lleno de oportunidades, aunque el entorno demuestre todo lo contrario.
Hablar de oportunidad, pensamientos positivos y resiliencia dentro de una pandemia pareciera ser imposible, pero hoy lo haremos.
Entendiendo la resiliencia
Esta capacidad de afrontar, de adaptarse y de ver oportunidades donde otros no las vislumbran es lo que se conoce como resiliencia.
Para Garmezy, 1991 (citado en Becoña, 2006), se puede conceptualizar como la habilidad de recuperarse de eventos negativos.
Mientras que en una definición clásica, Grotberg (2004), la considera como la capacidad del ser humano para hacer frente a las adversidades de la vida, superarlas e inclusive, ser transformados por ellas.
Una persona resiliente tiene un perfil propio del que renace de la adversidad, se adapta, se recupera y accede a una vida significativa y productiva.
Tal capacidad se puede extender a los diversos ámbitos donde estas personas sean actores, pudiendo sobreponerse a situaciones críticas o negativas de forma favorable, siempre mirando hacia adelante. Un ejemplo claro de situación es la pandemia.
Para Müller (1996), considerando el modelo ecológico-transaccional ideado por Bronfenbrenner, será resiliente aquel que presente la capacidad de enfrentar el estrés económico y ecológico, y alcanzar en medio de ello una alta satisfacción de las necesidades.
Esto, sin que el proceso por el cual atraviesa la persona minimice su habilidad de continuar satisfaciendo sus necesidades ni para disfrutar con agrado en el futuro.
Un gran problema de la resiliencia como concepto es su definición, debido a que todavía no se le ha logrado dar un significado único.
Sin embargo, diferentes autores han coincidido que hacer referencia a la resiliencia trae a colación factores como la adversidad, el riesgo, el afrontamiento y la recuperación.
Hablan los teóricos
Desde múltiples disciplinas se ha abordado este concepto, dándole una interpretación similar más no igual, haciendo su aplicabilidad de uso relativo.
Al respecto, Bartelt, 1996 (citado en Becoña, 2006) indica que la resiliencia es un término “difícil de apresar, así como de especificar empíricamente y muy relacionado con medidas de éxito y fracaso situacional”.
Para Garmezy 1991, “el concepto de resiliencia no implica tanto una invulnerabilidad al estrés sino la habilidad de recuperarse de eventos negativos”.
Para este enfoque en específico es necesario empezar a percibir y a tratar a las personas de forma diferente. La evolución del mundo nos ha demostrado que aquellas personas resistentes al cambio suelen desarrollar malestar.
Quizás te preguntes si eres candidato a la resiliencia y la respuesta es ¡SÍ!
El ser resilientes se ve conformado por la situación que vives, tus estrategias de afrontamiento, la manera en la que puedas vislumbrar la oportunidad dentro de la crisis y sobre todo las diferencias individuales.
Para lograr detectar que una persona posee o no este atributo, primero hay que someterlo a cierto nivel de estrés. Es a partir de allí donde se puede analizar los diferentes estados de la resiliencia.
Integra la resiliencia en tu vida, con 5 pasos
1. Confía en ti, aunque todo el mundo está marchando a un ritmo que no sientes tuyo, mantente confiado en tus procesos y en tus proyectos.
2. Trabaja siempre en tu autoestima, verte de manera realista ante situaciones demandantes te hará ver las soluciones basadas en quien eres y no en quien dices ser.
3. Sé flexible. Esta es una de las principales características de personas altamente resilientes. Planifica y organízate, pero ten en cuenta que quizás algo no salga como lo planeaste. Piensa cómo resolver.
Aunque siempre apuntes al logro, deja un porcentaje para la contingencia.
4. Trabaja en tu autocontrol. En este punto es importante conocer tus emociones y cómo influyen. Aplica la autocompasión y no seas tan duro contigo mismo. Tratarte mal no te hace resiliente.
La Resiliencia se construye desde una relación sana con nosotros mismos
5. Cuando la crisis esté presente, observa lo que hay detrás, qué ganancia posterior podrá darte esto, por ejemplo: más tiempo para renovar esos planes olvidados.
Recuerda: toma el tiempo para enfocarte en las experiencias que son enriquecedoras, trabaja en desarrollar un estado de ánimo que aporte a tu bienestar y en mejorar tus fortalezas personales.
Enfocarte en estos factores te ayudará directamente a identificar y reconocer tus cualidades personales y cuáles son esas estrategias que te funcionan a la hora de ser resiliente, tanto ahora como en tiempos de post pandemia.
Esperemos que ese tiempo llegue pronto. De cualquier manera, nos encontrará fortalecidos. ¿Sí o sí?
Sobre la autora: Psic. María Daniela Vivas Busani – Venezolana – @psicoencontacto – Psicólogo mención Social, egresada de la universidad Rafael Urdaneta. Actualmente radicada en Buenos Aires. Formada en la estructura cognitivo-conductual. Tiene experiencia en procesos de intervención familiar y abordaje de pacientes con enfermedad mental como bipolaridad y esquizofrenia, así como también en el tratamiento de ansiedad y depresión.
¿Te gustaría una consulta con la Psic. María Daniela Vivas?
Hola vivo en el Estado Tachira. Soy de Caracas, he tratado de apostar a la resiliencia, pero no ha sido fácil, aqui la situación cada día es más difícil para acceder a un empleo nuevo a una posibilidad de salir adelante, existe la posibilidad de volver a caracas en donde tengo una oportunidad laboral buena pero el pánico se apodera de mi y no me deja avanzar. Hoy al recibir la noticia de ese empleo me lleno de alegría y unos minutos después me dio un ataque terrible de angustia miedo como que no me deja tomar una decisión. Es alli donde me veo y dijo debemos seguir pero cuesta no es facil
Hola Andreína , permíteme agradecerte primero por expresar por acá lo que sucede y mostrarnos tus #emocionesreales , ahora bien la crisis es dificultad neta y en ella conectamos con la vulnerabilidad , te invito específicamente en tu situación a reconocer que acompaña este miedo , ¿Que te brinda está oportunidad? ,evalúa los pro y los contras de esta nueva oportunidad , decide teniendo en cuenta el momento y contexto, enfócate en lo bueno que te presenta a partir de esta oportunidad , flexibilidad ante la crisis hace más fácil la adaptación.
Te acompañó
Cualquier cosa por aquí estoy a la orden
No siempre es fácil ser resiliente, aún cuando sé que lo soy, soy una migrante venezolana, que salió del país como muchas madres dejando a su hijo para poder darle mejor calidad de vida, con la esperanza de regresar por él. Ya han pasado casi tres años de eso… Y aún no he logrado regresar por él. Me digo a mi misma que si podré, que si voy a lograrlo pero cada vez que estoy a punto de lograrlo pasa algo y me lo impide, el año pasado fue el cierre de las fronteras para los migrantes venezolanos, este año fue la pandemia… Es muy doloroso ser resiliente ante tantas situaciones adversas!
Me siento cansada, agobiada, decepcionada de no poder cumplir aún con lo que me propuse, siento que le fallo a mi hijo cada vez que me dice que quiere estar conmigo y no puedo traerlo!
Hola Moma te saludo y te entiendo enfrentarse a la migracion es una situación que nos hace desconectarnos de momentos ,de lugares y más aún de familiares.
Han sucedido cosas en el mundo que nos hacen alejarnos de esos planes que hemos construido , es allí donde es prudente entender los tiempos y saber que a pesar que no se estén cumpliendo a cabalidad , tu esfuerzo está intacto , la resiliencia forma parte de ti .
Trabajar en aceptar que han sucedido situaciónes que no depende de ti es lo primero.
Te dejo un abrazo y acá estoy para ti.