Durante muchos años, Daniel ha sido esclavo de su trabajo, siempre enfocado en un mejor futuro, darle todo a su pareja y a sus hijos, viajar, disfrutar la vida. Su adicción al trabajo lo tiene sitiado.

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¡Ya no tengo vida, no descanso, estoy agotado, me duele todo! Esta exclamación da cuenta del estado emocional exacerbado de alguien que sobrepasó sus límites físicos y mentales, en pos de la adicción laboral.

Daniel es firme candidato al trabajador del año, pero la factura a pagar es muy alta. Su adicción al trabajo lo ciega y no sabe cuándo parar.

Produce y produce, pero nunca está de ánimos para disfrutar los frutos de su esfuerzo.

Tiene 38 años y toda su vida ha sido esclavo de su trabajo, el cansancio lo está agotando y yo no tiene vida, no sale, no socializa, ha perdido contacto con su familia.

Esto le ha sumado no pocos problemas en su hogar: cuando llega a casa, solo quiere comer y dormir. Su mente está a mil por horas, siempre piensa en el trabajo, en nada más.

Repasemos las consecuencias de la adicción al trabajo, con la Emily González, psicóloga del Team Psicovivir.

¿Qué ocasiona la adicción al trabajo?

Desde la perspectiva de la neurociencia, la adicción al trabajo la podemos definir como una sobre estimulación del sistema de recompensa en el ser humano; es decir: toda conducta tiene consecuencias positivas o negativas que nos permiten garantizar la supervivencia.

Este sistema de recompensa (dirigido por el núcleo accumbens del cerebro), es el que se encarga de determinar qué sensaciones hay que repetir porque generan bienestar y, por lo tanto, supervivencia.

Sin embargo, no discrimina entre estímulos nocivos para la salud, por ello, se puede activar ante estímulos como las drogas, comida en exceso, entre otros (Hipólito, 2019).

Si lo vemos desde la adicción al trabajo o workaholics como también se le conoce, cuando mi jefe me llama en la noche diciendo que confía en mí para terminar algo urgente, mi núcleo accumbens se activa para trabajar hasta la madrugada, porque eso garantiza mi supervivencia en el trabajo.

Si, además, reconoce mi esfuerzo pública o monetariamente, en futuras ocasiones ya no necesito que él me llame, porque mi propio circuito de recompensa me dice que continuar trabajando fuera de mi horario laboral, me llevará a tener nuevamente ese reconocimiento de mi jefe, y garantiza mi supervivencia en la organización.

Aunque en la actualidad no hay una sola causa que explique el workaholics, sí existen unos factores de riesgo a tomar en cuenta.

PSIC. EMILY GONZÁLEZ

¿Cuáles son las características del adicto al trabajo?

Según el psicoterapeuta, doctor en filosofía y profesor emérito de la Universidad de Carolina del Norte, Bryan E. Robinson, entre las principales particularidades de las personas que sufren de adicción al trabajo, destacan:

¿Cuáles son las consecuencias de la adicción al trabajo?

Sin dejar de mencionar que, producto de la adicción laboral hay una mayor predisposición a las enfermedades físicas y orgánicas, desde el punto de vista psicológico, las consecuencias son variables.

Las principales manifestaciones emocionales incluyen:

Afectación en la esfera cognitiva (control inhibitorio, toma de decisiones racionales e inflexibilidad cognitiva)

Daño a nivel comportamental (irritabilidad, cambios en los hábitos de sueño, alimentación y conductas adictivas)

Impacto en el ámbito social (aislamiento, disminución de las habilidades interpersonales, tendencia al conflicto)

Alteración del autoconcepto (desarrollo de la autopercepción con base en su desempeño laboral)

¿Qué se esconde detrás de este comportamiento?

Detrás de la conducta adictiva al trabajo se esconden varias creencias.

Primero, la adicción al trabajo podría considerarse como un comportamiento no solo socialmente “aceptado”, sino también reconocido por la cultura como sinónimo de eficiencia.

En este sentido, hay una tendencia del ser humano a satisfacer a su entorno laboral, social y familiar, ya que a mayor dedicación al trabajo se le puede considerar como alguien más productivo.

En segundo lugar, la creencia desproporcionada en el adicto de que, si disminuye su dedicación excesiva, puede perder los ingresos, beneficios, reconocimiento, el puesto de trabajo, ser reemplazado, entre otros.

También pueden manifestarse en el adicto creencias de incompetencia, incapacidad y baja autopercepción, que se compensan a través de la sobre exigencia laboral, y la cual puede ser indicativo de rasgos de personalidad, trastornos depresivos y/o ansiosos, entre otros.

4 recomendaciones para Daniel (o cualquier persona con adicción al trabajo)

  1. Exprésale tu situación a tu supervisor, área de salud ocupacional o talento humano y establezcan objetivos para disminuirlos. Si trabajas como independiente debes acudir con un psicólogo.

Team Psicovivir

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